Nico
No ha pasado nada nuevo otra vez. Lo malo de que las cosas se aceleren y alcancen un climax es que después es inevitable un gran silencio. Ahí estaba hasta ayer que apareció en mi celular un mensaje de que habría salido una notificación del juzgado. Hoy ya envié a Fernando un mensaje para ver si ya fue a ver. Están todas mis armas listas para avanzar pero necesitamos la señal. Un acuerdo del juez para reanudar las visitas o la negativa de que estas se den, en realidad cualquiera de los dos escenarios es bueno para mi pues tengo estrategia para ambos. Si las restablecen, que veo muy difícil, haré la FIESTA de mi vida, tendré que hacer algo para no morir de felicidad y tendré que contenerme para no comerte a besos… De lo contrario, tendré que echar a andar a Miguel, tendremos que meter otra apelación más, tendré que seguir guardando tus juguetes en una bolsa negra para que no los vea Arí… jeje
Por cierto, ayer fue el día de los recuerdos. Me tocó llevar a Arí a su escuela y justo cuando bajaba las escaleras, me acordé de como tu y yo jugábamos a que yo subía por las escaleras mientras tu subías con mamá por el elevador. Como nos reíamos cuando yo llegaba poquito después de que se abrían las puertas. Me acordé mucho de nuestro vecino, al cual casi nunca veíamos, pero que te regalaba galletas marías y un día hasta te metiste a su casa.
Luego, en la tarde, me senté a Arí en las piernas para ver videos, tal como hacíamos tu y yo… mira lo que encontramos.
y este también
Cuantas veces los vimos sentados en mi silla, mientras tu mami veía la tele o descansaba, o antes de bañarnos… te extraño sabes…
A. Salomón
septiembre 23, 2016