delchoro

Hola Nico
Hoy empezaron las vacaciones, las tuyas y las del tribunal. Ellos volverán hasta dentro de quince días y seguramente tu tienes más tiempo para descansar. Te hice un audio que tal vez este aburridón pero pues tenía ganas de hacerlo y aquí te lo dejo.
Otra cosa, hoy me enviaron el reporte que emitieron en el Juzgado sobre mis 10 sesiones de terapia. Me parece que otra vez me ponen como el malo pero si se aprecia plenamente mi intención de resolver este conflicto. 
Hablan de mi relación extramarital como si fuera un delito. Con el paso del tiempo, he aprendido a llamar las cosas por lo que son. No soy una persona infiel y no tenía una relación extramarital, estaba viviendo una vida que no quería al lado de alguien a quien no quería y que abusaba de mi. Me escapaba de esa realidad teniendo relaciones efímeras como si fueran pequeños actos de rebeldía ante una realidad que no era capaz de cambiar. No soy mala persona y ahora, al lado de Ale, no necesito andar de loquillo porque mi corazón esta lleno y mis anhelos están satisfechos. 
Reconozco que fue esos actos solo me llenaron de culpa y lejos de empoderarme me fueron restando honestidad y derechos ante tu mamá. Nora tampoco es una mala persona pero en su anhelo de tener y de no soltar, no vio lo que a todas luces era cierto: no correspondíamos el uno al otro. Cuando descubrió mis aventuras, pudo separarse pero decidió someterme, castigarme. El resultado: una relación de odio y no de amor en la que se cobran las cosas. Tu mamá sigue cobrándome aun hoy, a tres años de haberme separado de ella. Sabe que no hay nada más entre ella: no hicimos negocios juntos, no le robé nada, no le pido que me pague nada… así que lastima el amor que hay entre tu y yo para seguir lastimando. Entiendo una parte de ese gran enojo pues ella es una mujer con un gran ego que debe estar muy lastimado por mi… pero también creo que la única forma de avanzar en la vida es terminar, perdonar, dejar fluir.

Aceptar que nos lastimamos y seguir adelante, al final yo no creo haberlo hecho por odio, solo era falta de carácter, inmadurez, estupidez que solo disuelven los años y las experiencias como esta. Aceptar que no soy una mala persona a la que hay que seguir lastimando es aceptar también que puedo ser el padre amoroso para su hijo, así que cuando una cosas suceda, llevará a la otra… toca ser pacientes porque si ella no logra resolverlo, tu puedes tomar tu propia decisión. Claro, también puedes seguir odiando, pero existe la esperanza que un día tu digas, no quiero seguir odiando a mi padre, pues odiar a mi padre o a mi madre, es odiar la mitad de mi.


Si pudiera darte un consejo en la vida, sería el de no mentirte. En realidad todo este problema surge de no tener el valor de decirle a Nora… sabes, no me quiero casar, no estoy del todo enamorado. Debí creer en mi, en mi verdadero yo, el que habitaba debajo de todas esas pretenciones de hijo católico, de sociedad ultraconservadoras, de escuela de lasallistas, de universidad de pose de tener la novia bonita pero que no esta enamorado. Desde luego que crecimos con esa venda en los ojos los dos y creíamos que la vida era así, como la vivimos juntos por 14 años. Hoy, a mis casi 48 empiezo a vivir como debí hacerlo desde siempre. No es tarde y se siente muy bonito saber que me equivoqué pero que ahora se exactamente donde quiero estar y donde no. 


Te diría… Nico, obsérvate y pregúntate que te enamora, que te vuelve loco, que te enoja o hace sentir incómodo. No importa que tan estrafalario suene, ve por la vida y hazlo, constrúyelo, invéntalo, vívelo. No te sometas a tus decisiones, construye con tu olfato, se intuitivo y cree en ti, en que tu tienes la razón, tus elecciones son sabias si vienen de lo profundo y no del que dirán, o del deber ser. En eso, por los 6 años que pasamos juntos, se que te tocará enfrentar porque muchas veces te tragabas tus sentimientos. Más de alguna vez te vi esconder tus emociones, aguantar, guardar las apariencias. Te digo, amor de mi vida, que tienes que aceptar lo que sea que la vida te ponga y aceptar tu ira, tu odio, tu enojo, como aceptas tu risa, tu amor. Yo estaré ahí siempre, yo estoy más allá de esto. Puedo recibir con humildad tu odio, siempre y cuando este sea auténtico. Siempre preferiré el lado luminoso de tu corazón. Eso te lo digo porque lo vi, lo sentí. Eres un ser hermoso, que como sus papás, tiene un mundo de sombras por mucho tiempo reprimido. En la medida en la que lo aceptes y lo vivas, sanarás esa parte de ti, de mi y de mamá.

Te quiere tu papá pipo, el que cada mañana besa una piedrita luna pensando que un día esa piedrita llegará a tus manos.

A. Salomón
 julio 18, 2016

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *