Nico
Voy una vez más al juzgado. Esta vez, no me siento nada ansioso y creo que tiene que ver con que esta semana fui s ver a La Dra. Bertha. Hablar con ella siempre me hace bien. Voy tranquilo también porque estoy seguro que tu mamá no irá y nuestra presencia no es obligatoria. Yo decidí ir por no dejar pasar una oportunidad de dialogar con ella o al menos ver cómo van las cosas con mi abogado, así es que si fui… es como sentir que hago algo por ti, además que ya va a ser nuestro cumple y pensaba que tal vez, por algún descuido del destino, podría verte afuera del juzgado…
Desde luego que eso no pasó. Otra vez subí los 8 pisos del Tribunal siempre pensando mil cosas y sintiendo a cada paso que aparecerás o encontrar a tu mamá y poder aclarar las cosas… nada de eso pasó, subí solo esas escaleras, de un jalón hasta quedar sin aliento.
Hoy es día de acción de Gracias en el país de enfrente, pero creo que yo si tengo hoy mucho que agradecer. Lo primero es que por fin le pusieron un sello a mi expediente que dice: PARA SENTENCIA. Esto es, que en unos días más, el juez dirá como será mi régimen de visitas contigo. No quiero especular nada pero cuando vi que ponían este sello, sentí como un gran alivio y como si algo hubiera triunfado en esta vida.
Toca ser pacientes y pedirle a todas las energías del universo que se sumen para que la sentencia sea lo más justa y se inicie otra etapa nueva en nuestro conflicto. De cualquier forma, Fernando, el abogado me dijo que si a tu mamá no le gusta la sentencia, se puede inconformar y si aun así no le convence, puede meter un amparo. Todo eso nos llevaría casi medio año más, por lo que seguimos insistiendo en que se realicen las terapias para que a la brevedad podamos vernos en el régimen de visitas provisional.
A. Salomón
noviembre 26, 2015