deLucio

Nico
Ya se han calmado las aguas… ya juntamos el dinero para el libro y la gente sigue aportando. Me contactó Fernando Soto-Hay, un papá que dió $10mil pesos a la causa. Está muy interesado en que este libro se haga en grande y me parece buena idea. Me mandó el teléfono de una mujer en Porrua y en enero voy a ir a verla para ver si nos ayuda a hacer el libro. Si esto camina, nos montaremos en una plataforma super poderosa para que exista. También conocí ayer a Fernando Galvez, el oaxaqueño, que me pareció muy inteligente. Siento que ahora si estoy en un lugar interesante para poder proponer ideas que sirvan para hacer cambios. 
También pienso y siento que si tengo que hacer ese ritual de tomar la energía masculina para esta nueva etapa. Se siente ahora si con mucha claridad que no la tengo y que en esta lucha, se necesita, así que me esforzaré por que este diciembre o en enero suceda. 
Desde ayer empecé a hacer unas animaciones para Ale y a estar más presente en casa. Todo este torbellino me ha obligado a no estar tan presente y tengo ganas de estar más aquí. La tarde de ayer fue muy bonito porque Ale compró unas velitas de colores y las pusimos en la chimenea a manera de arbolito de navidad… 
Ayer me contaba Fernando Gálvez que su hijo de 12 años, Lucio, fue llevado al juzgado a hablar en contra de su padre pero que el peque, aprovechó para contarle al ministerio público los maltratos de su madre. Le conté que yo pensaba que tu eres diferente, que te guardas las cosas como yo y que seguramente pero él me dijo que pensara en ti como un guerrero, como un chavo que sabe lo que esta pasando y que lucharía cuando fuera el momento por volvernos a ver. Eso me llenó de luz, creo que a veces te subestimo y creo que ya me olvidaste, es mejor pensar que no, que tu, igual que yo, se duerme todas las noches pensando… donde estará? Así que desde ayer, cada vez que te invoco, lo hago a través de tu Angel de la Guarda y te asumo como un hijo que esta de pié peleando por ver a su padre.

No se donde vas a pasar estas fechas, me imagino que en la Granja o en tu casa… espero de verdad que no me olvides estos días. En casa de mis papás todos te invocaremos y se que lo sentirás.
Te quiere y te respira, tu papá

A. Salomón
 diciembre 17, 2016

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