Nico
Tu mami no se presentó para las terapias y al parecer tampoco te presentó a ti. Creo que la pueden multar pero lo más triste es que seguimos así, enojados sin querer arreglar las cosas ni entre nosotros ni contigo.
Te cuento que me quedé tres días de papá y mamá de Arí. Fue muy intenso pero al final estoy contento porque me siento ese papá que puede compartirlo todo con el Arí. Me pregunto porque casi nunca hice eso contigo. De verdad, muchas veces pienso que yo era como un niño que le daba miedo madurar y pavor hacerse cargo de su propio hijo. Ahora, en esta nueva relación y después de todo lo que ha pasado contigo, no estoy dispuesto a perderme nada de Arí pues no se si mañana lo tenga a mi lado. Es muy duro esto que estoy diciendo pero es verdad. Se que mucho tengo la culpa pero tiene también mucho que ver la madurez que ahora creo tener y que no tenía cuando te tuve. Aun así, mi recuerdo es que siempre salíamos en las tardes a jugar al parque y alguna vez, cuando tu mami se fue a Estados Unidos a sus cursos de meditación, yo me hice cargo de ti, claro, con la ayuda de Nona… te debes acordar…!
En fin, uno va aprendiendo a lo largo de la vida y yo ahora se que valor tiene el NO tener a un hijo cerca. Esa enseñanza ha taladrado mi corazón estos tres años y se que ya aprendí la lección.
Te cuento también que ya casi vendimos el vochito. Al parecer mañana lo vendo a mi casero, lo intercambiaremos por rentas!… jajaja
Ah… y te quiero contar que ya tenemos una nueva peli preferida de Arí. Así como para ti fue HAPPY FEET, este chamaco no deja de ver PONYO… aquí te dejo el trailer, un día la veremos los tres sentados juntos y comiendo palomitas (que ahora no le puedo dar porque se le pegan en el estomago)…
Te mando besos mi hermoso Nico, no dejo de pensarte y de invocarte.
A. Salomón
A. Salomón
febrero 17, 2016